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La Suprema Corte de Suecia encontró este miércoles que las dos jueces encargadas de llevar el caso de Pirate Bay no favorecen a nadie.

Las jueces Kristina Boutz y Ulrika Ihrfelt habían sido acusadas de favoritismo debido a su participación con organizaciones en pro de los derechos de autor. La determinación de la Suprema Corte da lugar a que participen en el caso en contra de Pirate Bay por violación de la ley de derechos de autor contra compañías de entretenimiento. El caso está programado para el próximo 28 de septiembre dijo la Corte Svea de apelaciones en marzo pasado.

Pero las fechas no son definitivas, dijo Peter Sunde uno de los cuatro acusados quién no asistirá a la apelación, y la Corte tiene ahora que determinar si las razones de Sunde son legitimas, según la juez Ihrfelt. Las acusaciones de favoritismo habían evitado que la Corte retomara el caso, dijo Ihrfelt.

Si las razones de Sunde son legitimas, la fecha del caso podría posponerse, dijo Ihrfelt. El caso se pospuso el año pasado debido a las acusaciones en contra de Boutz e Ihrfelt por Carl Lundström, otro de los acusados en el caso.

Ha pasado poco más de un año después de que Fredrik Neij, Gottfrid Svartholm Warg, Sunde y Lundström fueron encontrados culpables de crímenes en contra de la ley de derechos de autor, y fueron sentenciados a un año en prisión. Además la Corte de Distrito de Estocolmo ordenó el pago de 30 millones de coronas (aproximadamente 3.9 millones de dólares) en daños. Los cuatro acusados apelaron el veredicto.